Según explicó a la Radio Vaticana el obispo de la diócesis de Albano (sur de Roma), Marcello Semeraro, el pontífice será recibido también con campanadas en la residencia estiva del Castel Gandolfo, donde pasará sus últimas horas como vicario de Cristo.
Desde el balcón central de las villas pontificias el todavía líder católico saludará a los habitantes de ese poblado, ubicado a unos 25 kilómetros al sur de Roma. Será su último discurso público en el cargo.
Mientras tanto la Oficina de Filatelia y Numismática del Estado de la Ciudad del Vaticano está preparando una especial edición de monedas del euro vaticano con una inscripción referida al periodo de sede vacante.
"Estas monedas circularán hasta que el Cónclave elegirá un nuevo pontífice y que debería ser nombrado, según las previsiones, a mitad de marzo", dijo a la prensa Umberto Moruzzi, miembro de la Consulta numismática vaticana.
Con el anuncio de la renuncia del Papa, aumentó la demanda de parte de los coleccionistas a la serie de monedas del sistema euro de la Ciudad del Vaticano con la fecha 2012 y la cara de Joseph Ratzinger.
"La serie tuvo un incremento del 25 por ciento de su valor original y podría continuar el aumento, considerando la demanda. (Las monedas de 2012) corresponderán al último año emitido de Benedicto XVI y, por lo tanto, más recordarán el acontecimiento histórico", dijo Moruzzi.
Empero no excluyó que las monedas con la efigie de Ratzinger sean emitidas también en 2013, no obstante su renuncia, ya que se encuentran en preparación, ya cuñadas y en fase de emisión.
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