¿Cuántos de nosotros hemos estado en una situación en la que ha llorado a Dios en señal de frustración o angustia y dice: "Dios arreglar esto! Haz que deje de doler!", pero sin embargo, se abstiene de darle todas las herramientas que necesita para realmente sanarnos por completo. Estamos dispuestos a renunciar a las piezas que están dispuestas a rendirse, pero luego hay partes de nuestras heridas que son tan sensibles a dejarse llevar por la ira, la amargura, dolor, etc.
La cuestión aquí es la confianza. Se consiguió empezar por ahí. Tiene que comenzar con el corazón y el alma de lo que somos. Tenemos que crecer desde adentro hacia afuera, no de afuera hacia adentro. A menudo nos encontramos en pequeños grupos o programas de divulgación y nos sentimos como que estamos haciendo todo lo correcto para ayudar a cambiar nuestras vidas y ser mejores personas. Bueno, esta todo vacío si no hemos empezado a trabajar en su interior.
Tantas veces he sido defraudado y engañado y traicionado y herido y bla, bla, bla. Es muy fácil quedar atrapado en el "pobre de mí" y los sentimientos negativos que hervir con temor y pesar. Yo creo que Dios tiene mucho más para nosotros. Creo que quiere librarnos de la cautividad de estas mentiras. Percatándonos de esto, nos damos cuenta de que tenemos el poder para identificar las mentiras de la verdad, que es Cristo Jesús.
No cabe más que decir, debemos tener siempre presente, Jesús Cristo tiene que ser el centro de tu corazón, solo el puede sanarlo.
